¿Somos simplemente el escaneo decadente de las ordenes de un jefe?
¿La fotocopia estadounidense corrida de tinta por el charco que nos cuida?
Puedo vernos como:
Interactuaciones continuadas con rituales de comunicación a base de palabras arraigadas.Palabras dichas por las profundidades marinas, en ondas acuosas de sirenas mudas; cero femeninas.
Entre tics y muletillas ancestrales danzamos dentro de frases vacias.
El habla se convierte en puros gestos rápidos, médicamente clasificados de homocontemporáneus.
Menudo privilegio ser capaz de tertuliar y perder el tiempo de lo establecido.
Ser sumamente feliz en el cocktail de letras y miradas coordinadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario